lunes, 16 de abril de 2018

Certezas

Hoy, pese a lo que pasa allá afuera, me pareció un día tranquilo. Casi no he mediado palabras con nadie. En la mañana me atrajo el paisaje que me cruza siempre que voy al trabajo; todo estaba radiante. Por propia iniciativa fui bañado por el sol, en el camino me pareció distinguir el canto de hasta cuatro pájaros distintos, tuve ganas de saber el nombre de las plantas que pasaban y envidié a las despreocupadas personas que creí ver a lo lejos. ¿Aprecié la rutina?, tal vez. Quizás sólo se me olvidó lo monótono de todo esto.